El Banco de Crédito de Bolivia se ha puesto, ante la transformación digital, en la tarea de asumir este como un momento crítico, que implica una reinvención basada en la mejor experiencia bancaria. Pero este tipo de reinvención no se puede hacer por cuenta propia, exige una co-creación con los clientes, escuchando lo que van necesitando a medida que avanzan los negocios y las necesidades personales en cuanto a los servicios bancarios, y de esta forma el Banco de Crédito de Bolivia ha encontrado que hay muchas empresas pequeñas produciendo las soluciones precisas para este tipo de necesidades y para la evolución de las mismas a medida que la tecnología avanza y las interacciones se amplían en todo el mundo.
Por otra parte, conocer, entender y anticipar las necesidades de clientes particulares y corporativos no es solamente cuestión de dar manejo a la big data y preguntarse lo correcto. El small, data, es decir todo eso que personal e íntimamente va configurando el conjunto de costumbres y usos que moldean las necesidades de servicios que van surgiendo entre los distintos clientes, debe ser observado desde lo antropológico, lo psicológico y lo administrativo. Asumir los cambios y exigencias actuales de los mercados para el Banco de Crédito de Bolivia ha implicado cambios al interior, con un liderazgo basado en escuchar y pensar antes de decidir y hacer, pero planeando y ejecutando rápidamente para poder utilizar la presión de esas necesidades y de la velocidad de los movimientos de los mercados y los avances tecnológicos como el aliciente necesario para crecer en función de responder oportunamente a lo que los clientes van necesitando.
El Banco de Credito de Bolivia, BCP, llega entonces a su cuarto de siglo funcionando bajo la mentalidad de evolucionar con los tiempos, para sostenerse y seguir creciendo. En este video Miguel Solís, del BCP, nos comenta todo lo relacionado con esta permanente reinvención, co-creando el banco con sus públicos.