La historia de Lazo es la de tres emprendedores que, después de muchos años soñando con asociarse, encontraron la oportunidad perfecta para lanzarse al mundo de los negocios. Todo comenzó con la búsqueda de un cinturón elegante y moderno para la oficina por parte de Salomón, uno de los socios fundadores, cuando iba a iniciar su práctica profesional. Al no encontrar muchos productos similares en el mercado, él junto a Sara y Martín, decidieron importar algunos de China y venderlos por Instagram. El éxito fue tan grande que crearon Lazo, una marca colombiana de accesorios masculinos modernos, elegantes y asequibles.
Desde el principio, los fundadores de Lazo estuvieron comprometidos con la idea de mostrar el talento de la manufactura colombiana y de crear productos únicos que destacaran en el mercado. Con un enfoque en la calidad, la atención al detalle y un compromiso profundo con sus clientes, Lazo rápidamente se hizo un nombre en la industria.
En un mercado olvidado y con pocas opciones innovadoras, esta compañía decidió apostarle al negocio de accesorios para hombres y se especializó en crear una experiencia de producto y empaque que los convirtiera en una solución ideal para el mercado de regalos masculinos.
Desde su lanzamiento en 2018 y con un capital inicial de $900.00 de cada uno de los socios, la marca ha logrado administrar eficientemente sus recursos y crecer de manera sostenible, sin tener que buscar financiación externa.
Sara Marín, una de las fundadoras, aseguró que desde entonces, la marca ha crecido exponencialmente. “En el primer año vendimos $60 millones y en el segundo año, $600 millones, lo que tradujo un incremento del 900%. Pero nuestro éxito no se detuvo allí y la innovación de nuevos productos nos permitió nuevamente hacer historia con las cifras. Para nuestro tercer año en el mercado, logramos crecer 233% con ventas cercanas a los $2.000 millones; mientras que en 2022, cerramos con un total de $4.500 millones, lo que equivale a casi US$1 millón”, aseguró la vocera, quien además agregó que es así como han ido consolidando su posición en el mercado de accesorios masculinos.
Con una estrategia de marketing bien planificada y una imagen de marca sólida y coherente, Lazo ha logrado establecer relaciones duraderas con sus proveedores y diversificar sus canales de venta con el lanzamiento de su sitio web y la apertura de tres tiendas físicas en los mejores centros comerciales de Bogotá (Andino, El Retiro y Parque La Colina).
Sin embargo, no el camino no ha sido tan fácil como parece. “La pandemia fue nuestra primera gran dificultad. En aquel momento, habíamos decidido montar tres islas en centros comerciales que solo duraron 15 días. Habíamos invertido todo lo que teníamos en mobiliario e inventario para cubrir estos nuevos puntos, lo que nos dejó sin flujo de caja para responder a nuestras obligaciones. Sin embargo, debido a esta situación nos reinventamos lanzando lazo.com.co lo que nos permitió crecer a nivel nacional. Además, los tres tuvimos muy poca experiencia laboral, por lo que hemos tenido que aprender por nuestra cuenta todo lo que implica dirigir una empresa, desde pagar impuestos y tratar con el personal, hasta crear productos desde cero. Aunque ha sido un camino difícil, nos ha demostrado que se puede llegar a donde se quiere y que, si se quiere convertirse en un experto en el tema, es cuestión de tener ganas y hacer que las cosas sucedan”, comentó Sara.
Lazo ha logrado su éxito gracias a varias claves importantes. “En primer lugar, el compromiso inquebrantable de los tres socios fundadores, quienes nos enfocamos en el negocio al 110% desde el primer día. Trabajando sin jefes y sin temor al fracaso, dedicamos nuestros días a encontrar formas de hacer crecer la empresa. Además, siempre pensamos en grande, sin límites ni miedo al fracaso, convencidos desde el principio de que podríamos tener la empresa de accesorios de hombre más grande de Colombia. En tercer lugar, reinvertimos el 100% de las ganancias en el negocio lo que nos permitió crecer sin tener que buscar recursos externos y mantener un flujo de caja suficiente. Por último, siempre hemos puesto al cliente en el centro de todo lo que hacemos, asegurándonos de que cada decisión que tomemos agregue valor y beneficie a nuestros clientes.
Los fundadores de Lazo tienen perfiles distintos que complementan sus habilidades mutuamente. Salomón Hakim es el encargado del área de creación de producto y servicio al cliente, enfocado en los detalles. Martin Carvajal es el encargado del área administrativa y financiera, con una mentalidad numérica y organizada. Sara Marín es la encargada del área de mercadeo, apasionada de la creación de storytelling, el empaque y las campañas de marketing.
Lazo es un ejemplo de cómo una idea innovadora, combinada con pasión, compromiso, enfoque en el cliente y una estrategia bien planificada puede llevar a un emprendimiento al éxito en un mercado competitivo. Esta marca colombiana, que ya está presente en México y Estados Unidos, está revolucionando el mercado de accesorios masculinos con productos modernos, versátiles y únicos, y una atención al detalle y una experiencia al cliente excepcional. Entre sus planes está seguir expandiendo su marca a nivel nacional, bajo la propuesta de nuevos productos.