De acuerdo con un informe reciente de la firma Globaldata, para 2024 los ingresos en el mercado del internet de las cosas (IoT) llegarán a USD 1,1 billón. América Latina también hace parte de ese crecimiento como constata el estudio IoT Snapshot 2022, elaborado por Logicalis, que postula a esta tecnología como una realidad en América Latina y en continua expansión.
De acuerdo al estudio, entre 2018 y 2021, el número de empresas que se encuentran en fase de PoCs (prueba de concepto), proyectos piloto o iniciativas ya en producción creció 15% en América Latina, con el 47% de las empresas ya en proceso de implementación de IoT.
“Cuando miramos el futuro de la tecnología IoT a mediano plazo (de tres a cinco años), vemos una tendencia al alza, con el 71% de los encuestados calificando la importancia de las soluciones IoT para su negocio como «Muy Alta» y «Alta». Como resultado, el 35% de las empresas en hispanoamérica planean invertir en proyectos de IoT en los próximos 18 meses”, destacó el informe.
Entre las soluciones más utilizadas por estas organizaciones se encuentran: analítica de video para monitoreo de personas y ambientes (49%), gestión de inventario y logística interna (27%) y geolocalización (26%).
Los dispositivos IoT van desde sensores de humedad en tierras, hasta la pulseras que envían datos de presión arterial a laboratorios o centros médicos. La modalidad de uso de los dispositivos IoT en el ambiente industrial, es una tendencia creciente y justamente allí es dónde los expertos en ciberseguridad marcan la importancia de reforzar las capas de seguridad.
Dentro de esta proyección, los sectores con planes de inversión más concretos son Utilities, con un 56% de empresas apuntando a implementar tecnología IoT en sus negocios, seguido del área de servicios con un 40%.
Algunos desafíos por resolver en IoT
Según un informe del Laboratorio Palo Alto, el 57% de los dispositivos de Internet de las cosas (IoT) son «vulnerables a ataques de gravedad media o alta», en la mayoría de los casos porque «no cuentan con la capacidad informática para la seguridad integrada», aseguraron expertos del sector.
El reporte indica que el 41% de los ataques aprovechan las vulnerabilidades de los dispositivos y que «los ataques relacionados con contraseñas continúan prevaleciendo en los dispositivos IoT debido a contraseñas débiles».
También señalaron que los cibercriminales incrementaron el uso de botnets para realizar ataques de negación de servicios (Ddos), a través de dispositivos IoT, lo que permite a los atacantes ejecutar código malicioso y realizar una variedad de ataques en simultáneo. Según la empresa Cisco Systems, el mercado de seguridad de IoT crecerá con una tasa anual promedio del 30% hacia el año 2025.
De otro lado, en cuanto a la implementación de este tipo de tecnología en las compañías, el presupuesto es el mayor impedimento para el 45% de los encuestados para el reporte de Globaldata. En segundo lugar, hay un tema cuya importancia ya apareció en la edición de 2019 del estudio: la cultura organizacional, que fue identificada por el 37% de los países hispanos como la principal barrera para las iniciativas de IoT.
En esa línea, según la firma Consulting Services de Logicalis, estos datos demuestran que, en general, a pesar de que aún queda un largo camino de conocimiento por recorrer dentro de las organizaciones, ya se están movilizando para cambiar ese escenario.
El estudio de Logicalis abarcó cuatro países latinoamericanos: Argentina, Chile, Colombia y México, e implicó la realización de entrevistas, entre agosto y septiembre de 2021, a 122 ejecutivos, divididos de la siguiente manera: Colombia (40), México (29), Argentina (23) y Chile (30).
Adicionalmente, el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), señaló la brecha digital como un factor crítico en el aspecto del desarrollo del internet de las cosas, por el aspecto de conectividad. “El de la brecha digital es un tema estructural. La pandemia nos dio un baño de realidad y hay un gran riesgo de atrasar los avances si no trabajamos por cerrar esta brecha”, resaltó la entidad en su último informe sobre transformación digital.
En el informe se hizo foco en la inclusión digital educativa en Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Perú y Uruguay, y arrojó que el 46% de los 144 millones de estudiantes de entre cinco y 12 años que no pudieron tomar clases presenciales durante la pandemia, tampoco pudieron acceder a clases virtuales.